NUESTRO DESTINO

NUESTRO DESTINO
Porque por gracia habéis sido salvados mediante la fe; esto no procede de vosotros, sino que es el regalo de Dios, no por obras, para que nadie se jacte. Porque somos hechura de Dios, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios dispuso de antemano a fin de que las pongamos en práctica. (Ef 2.8-10)
El Seńor ha dejado obras de antemano para que andemos en ellas, nuestro Dios no nos promete nada de acuerdo a nuestros recursos, es más, sus promesas están ligadas a lo que Él ha determinado y lo que nosotros hacemos de más, no cuenta. El quiere que nos anulemos y hacer El las cosas, preguntémonos ahora żquien de nosotros tiene promesas?, si bien es cierto a cada persona que el Seńor salva le da promesas y la facultad para realizarlas. Dios espera en su tiempo, el permanece, el nunca llega tarde, El es el Kairos, en El no pasa el tiempo, El nunca empezó, existen obras para que caminemos en ellas, y en ese caminar está el éxito de nosotros. Las promesas de nuestro Seńor vienen en el tiempo de Dios, en su tamańo y en su forma, y El nos habla de acuerdo a su voluntad no a la nuestra.
Dios tiene muchas fases para que nosotros comprendamos, es por eso que el Seńor Jesús utiliza varios nombres, recordemos que es Puerta cuando se necesita entrar a otra dimensión, es Pastor cuando se necesita cuidar ovejas, es Camino cuando hay que caminar, es Verdad cuando se vuelve conocimiento y es Vida cuando viene la plenitud y todo eso lo hace por amor a nosotros. Veamos cuando Juan estaba preso en Patmos oyó una voz, le hablo por detrás y el no sabía de quien era la voz, o sea que quien le estaba hablando, se estaba expresando en una manifestación que el no conocía, pero si Juan no conocía al Seńor no le podía dar su nuevo ascenso, era necesario que lo conociera en esa nueva dimensión, entonces el Seńor pronunció , que quiere decir convertirse a la voz que le estaba hablando, para que lo conociera.
Nosotros necesitamos un ascenso, pero eso no lo vamos a lograr si Dios no se nos manifiesta en una dimensión que no lo conocemos y así llegar a la plenitud que Dios nos a prometido, así como el Seńor le prometió a Abraham y le dijo: tu descendencia heredará esta tierra y tu morirás en paz, por que si no hay descendencia que herede lo que tengamos no nos podemos ir, por eso es que el apóstol Pablo cuando ya levantó a Timoteo y adiestró a Tito dice: Ąya me puedo ir!. Necesitamos aprender y llenar nuestro espíritu de misericordia por que muchas personas regresan al mundo por insatisfacción “religiosa” y lo impresionante es que cuando se encuentran así necesitan conocer un nivel espiritual superior y muchas veces no es posible conocerlo por su situación y culpan a la iglesia a donde asisten o a ellos mismos, pero debemos de entender que no podemos poner nuestro destino en otra persona, así como Abraham le dice a Sara, tengo que decir que eres mi hermana para que este Rey no me mate, es decir que Abraham estaba depositando su vida y su destino en Sara, mientras Dios ya le tenía preparada a Cetura, Abraham no iba a morir hasta que conociera a Cetura y la conoció después de la muerte de Sara, lo que pasa es que nosotros somos tan pequeńos que no vemos el lugar que tenemos en el Seńor. Abraham se quería morir y no sabia que Dios le tenia preparada otra mujer después que Sara, de la misma forma Elías se quería morir, Jesús sangró gotas de sangre muriéndose también, pero Dios es aun más extraordinario que ese deseo de morir por un momento.
Abraham tenia una mucha fuerza, probablemente por que Dios era quien lo ubicaba, żquien hubiera querido salvar a un Lot que era sodomita?, es necesario que algunos hermanos caigan “presos” para que lleguen los Abraham y salven su vida y de esa manera se abra la puerta que necesita Abraham para subir al siguiente nivel, necesitó salvar a Lot para que se le apareciera Melquisedec. Siempre somos la misma persona pero necesitamos ir creciendo, al principio no podemos caminar solos pero después hasta nuestro propio vehículo podemos tener; veamos entonces que Dios nos pide primero cosas que podemos hacer pero para darnos las promesas hay que hacer cosas de las cuales no estamos capacitados. La promesa que le fue dada a Abraham fue elevándose de acuerdo a como se fue elevando su siervo también, Abraham iba en línea recta y de repente aparece con el rhema del diezmo y se los da a Melquisedec y el le da pan y vino, y ve Dios que esta preparado y se le aparece y le dice el Seńor: Yo soy Jehová tu escudo, es decir que sin diezmo no tenemos escudo, nosotros necesitamos ir creciendo para que Dios se nos muestre como Jehová Magen. El diezmo no nos hace más espirituales por que es una obligación, las ofrendas si nos hacen más espirituales. Le dijo Jehová a Abraham: no temas, Abraham venia de ganar una guerra, lo que sucede es que Dios si sabe cuales son nuestros temores, pero al decirle el Seńor a Abraham yo soy tu escudo, el aprovechó y pide de acuerdo a la promesa que le habían dado y le dice Seńor yo no tengo a quien dejar mi herencia, y el Seńor le dice: me conocerás, trae mi ofrenda, y el Seńor le da su promesa, y ese día Abraham fue convertido en justo, ese diezmo hizo que Jehová se bajara a la tierra y lo hiciera justo.
Abraham le pregunta al Seńor como voy a heredar, y le dijo tráeme aves y el Seńor durmió a Abraham por que despierto no le funcionaba, antes se partían las ofrendas, en el oriente antiguo se partían las ofrendas como seńal del pacto y si no cumplían ese pacto se le otorgaba el derecho al Seńor de que los partiera como lo habían hecho con lo que daban de ofrenda, entonces Abraham se duerme y el pacto es entre Jehová y Jehová, pero Abraham le hace caso a Sara y le da autoridad para tener su destino y le dice yo no te puedo dar hijos, la esposa sabia la visión, y lo que pasa es que hay personas que nos aman tanto y somos tan importantes para ellas que hacen que nos salgamos de la voluntad establecida de Dios es por eso que todos los “grandes” tienen o una Sara o un Pedro diciendo no vayas a la cruz, entonces cuando vengan las promesas tenemos la necesidad de que alguien no las confirme o nos apoye para que las hagamos, recordemos a Jesús en Getsemani estaba orando y le pregunta: Padre, si quieres, pasa de mí esta copa, y bajo un ángel a fortalecerlo, entonces no busquemos la confirmación en la tierra de las cosas del cielo, el cielo tiene su propia forma de hacernos saber su voluntad. Muchas veces debemos de desconfiar de la que esta del lado de nosotros, de nuestra esposa por que nos ama mucho, por eso Jesús le dice a Pedro: me amas, y le contesta si te quiero, Pedro es amado por que es sincero y le dice a Jesús, Seńor ese nivel de amor que tu pretendes que yo te ame, no lo he alcanzado aun, ahora solamente te quiero, entonces Jesús se baja y le dice Pedro me quieres y le dice Si Seńor te quiero.
No nos seńalemos si el día de hoy las cosas no salen bien, dejemos que Dios se nos presente en una dimensión que no conocemos y nos de a conocer una dimensión superior, no se trata de desconfiar de nuestra esposa, solamente debemos de entender que existe un gran amor filial, Sara no entrego a Abraham con Agar por maldad si no que ella creía en la promesa pero la arreglo del modo terrenal, y Abraham paso trece ańos pensando que Ismael era el hijo hasta que Dios se le apareció, żcuantos ańos tenemos de estar allí creyendo que es la promesa?. No busquemos en la tierra lo del cielo, por el error de Abraham es que Israel no ha podido vivir en paz hasta el día de hoy, Dios a veces respalda pero no lo aprueba. No debemos de contarle a Saraí nuestra promesa por que esas cosas son entre nosotros y el Seńor.
Dios dijo los quiero viejos para que vean quien soy Yo, el Seńor no necesitaba de Agar, Dios no necesita de nuestra ayuda. Abraham fue padre de la fe, pero estuvo trece ańos equivocado con su promesa, pero esto nos da esperanza, lo de la tierra no afecta lo del cielo, y Abraham era el amigo de Dios, entonces żcomo estaremos nosotros? Viene Dios y después de los trece ańos cuando Abraham tenía noventa y nueve ańos se le aparee y le dice Yo soy el Shaddai, te tengo una promesa pero debes de ser perfecto delante de mi, ser perfecto quiere decir agarrarse de la mano de Dios y caminar donde el indique, ahora entendamos por que Jesús pide perfección, por que lo único que necesitamos es caminar con el Padre, y le cambio el nombre a Abram y le ordeno que le comunicara a Sara, no esperemos que nuestra esposa cambie primero. Al principio a Abram se le aparece solamente Jehová, luego del diezmo le dice soy Jehová Magen, y después Jehová Shaddai y le cambia el nombre, le da el ingrediente que le faltaba para llegar a alcanzar la promesa. Cuando ya no se siente el sabor delicioso de la salvación debemos de cambiarnos de dimensión y de expresión en Dios.
No dependamos de otras personas con respecto a nuestro destino, nuestro destino no depende de nuestro esposo o esposa ni de nuestro pastor. Recordemos cuando Pedro fue arrestado, la iglesia clamó como nunca ya que amaban a su apóstol pero el sabia que Herodes no era el dueńo de su destino. El que tiene el corazón conforme de Jehová puede tener el destino de otros así como David, tenia en sus manos el destino de los filisteos. Por eso Jesús dijo nadie es dueńo de mi vida, y dijo: el dueńo de mi vida es mi Padre y doy mi vida por que así lo quiere el Padre. No debemos de dejar nuestro destino en manos de nadie, nadie nos puede quitar la vida, nosotros tenemos destino, estamos sellados por el Espíritu Santo y cuando el diablo venga en contra de nosotros solo ve el sello y sale corriendo.

Pastor. Ricardo Pantoja Cruz